Más que producto del azar, la suerte depende de nuestra postura ante la vida. Creer en uno mismo, aceptar los obstáculos y atreverse a arriesgarse pueden estimularla a nuestro favor.
Hay gente que parece que ha nacido de pie, que tiene una estrella que la protege en momentos de adversidad, no dejando que las dificultades duren demasiado en sus vidas. Parece que no tienen que hacer nada para que la suerte se enamore de ellos y les acompañe a lo largo de la vida. Todos hemos conocido casos como estos: el que en un momento de agobio económico le toca la lotería; la que es abandonada por su marido y al poco tiempo conoce al hombre de su vida y vive a su lado una existencia mucho más feliz y plena; el que es despedido o deja su trabajo y dos meses después recibe una oferta golosa, mucho más gratificante.
Pero detrás de esto hay mucho más que un golpe de azar, es el resultado del esfuerzo personal, de tener una meta y un propósito claro en la vida, de luchar por ello superar los obstáculos del camino.
Todos y cada uno de nosotros podemos provocar la buena suerte, algunas personas tienen más suerte que otras. Es pura coincidencia, no creo que sea influencia de un orden mayor ni de la providencia por lo tanto podemos influir en ella.
Los amuletos. Son una opción muy si crees realmente en ellos pues estimulan la mente de manera positiva y la colocan en una situación de seguridad, nada malo te puede pasar.
Dejar la actitud de víctima. Los "pobre de mi" y "¿Por qué me tiene que pasar esto a mí?" no ayudan a salir de los contratiempos. Al contrario, hace que nos estanquemos en ellos. La actitud adecuada que se debe tomar es dejar aparte las emociones y dedicarse a aceptar la situación.
Tener un propósito claro. Luchar por él contribuye deforma increíble a ser más feliz, estar más satisfecho con la vida y conseguir lo que te propones.
Considerate como el principal creador de tu vida. Pensar que no son las circunstancias las que te hacen como eres, sino lo que haces con ellas, por ejemplo si pierdes el trabajo,lo puedes afrontar como la desgracia más grande de tu vida o verlo como un reto para encontrar otro trabajo.
Positividad. De cada contratiempo se puede sacar algo positivo. búscalo.
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